El paro es una de las mayores preocupaciones sociales en todos los países. Sus consecuencias sociales afectan a la vida cotidiana no solo de los que buscan empleo sino a la de todos los ciudadanos. Esta cuestión genera difíciles situaciones y son diferentes caminos los que pueden llevar a la salida.
La medición del desempleo es periódicamente materia informativa de primera página y viene siempre acompañada de polémicas sobre la validez de los datos y su interpretación. Es necesario conocer los matices y precisiones de los conceptos estadísticos de los tipos de paro que existen así como las variables que actúan en este mercado.
Las teorías del desempleo han sido frecuentemente materia de examen debido a su interés e importancia social. Ninguna de ellas es capaz por sí sola de explicar satisfactoriamente el fenómeno pero el conjunto de ellas permiten una aproximación bastante completa.
Variables básicas e indicadores del mercado de trabajo
- Medición del desempleo es realizada por las oficinas estadísticas nacionales. En España, el INE entrevista alrededor de 200.000 personas de la EPA (Encuesta de Población Activa)
- En función de su relación con la situación laboral, podemos clasificar a la población de la siguiente manera:
1 Población en edad de trabajar
1.1 Población ACTIVA: población que, estando en edad de trabajar, puede y desea trabajar.
1.1.1 OCUPADO: persona con empleo (en la EPA se considera persona con empleo a aquella que trabajo al menos una hora en la semana anterior a la entrevista, o bien, estaba de vacaciones esa semana)
1.1.2 DESEMPLEADO: persona sin empleo que lo busca activamente y esta disponible para trabajar.
1.2 Población INACTIVA: población que, estando en edad de trabajar, no desea trabajar (estudiantes, jubilados, amas de casas, rentistas....)
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